jueves, 3 de abril de 2008

Aquellos momentos.



No sé cuanto tiempo llevo ya sin verte,
ni tampoco sé si todavía tú me quieres.
En las noches tristes no paro de amarte,
y por eso mismo yo trato de olvidarte.
Quita de mi mente ya no quiero nada,
es que no te olvido, tengo una espina clavada,
tengo una espina clavada.
Siempre estoy recordando aquellos momentos que los dos pasamos.
Te sigo viendo en sueños,
tú siempre caminas y yo nunca te alcanzo.
Y no vuelves la cara, y tú no me miras,
sigues caminando, sigues caminando.
Le he dicho a la luna ya más de 1000 veces,
que ella, que es tan alta, que la busque y que la encuentre.
Por favor que le diga si me la encuentra,
que la quiero mucho y que me acuerdo de ella.
Tengo mil fatigas desde que has marchado,
es que no te olvido, yo sigo enamorado,
y es que yo sigo enamorado.
Siempre estoy recordando aquellos momentos que los dos pasamos.
Te sigo viendo en sueños,
tú siempre caminas y yo nunca te alcanzo.
Y no vuelves la cara, y tú no me miras,
sigues caminando, sigues caminando.